Pues sí, amigos, y es que hasta un día como hoy, lunes 20 de diciembre de 2010, no he podido terminar el dichoso juego, y eso que salió ya en el año 2000. Más que una cuestion de capacidad, siempre fue una cuestión de medios: nunca me pude hacer con un copia operativa hasta hace sólo unos días :)
El juego es un survival horror fiel al género que inició Alone in the Dark allá por 1992, y que la saga Resident Evil -seguida de la posterior, pero en absoluto inferior, Silent Hill- perpetró y consolidó hasta convertirse en una de las sagas más exitosas y en casi una garantía de calidad. Resident Evil: Nemesis nos sitúa en el rol de Jill Valentine intentando sobrevivir a la plaga iniciada por la infección del Virus-T tras los sucesos acontecidos en una famosa mansión de la que a duras penas escapó con vida; la huida de Raccoon City se complica cuando aparece una criatura antropomórfica en continua mutación que parece tener por objetivo el aniquilar a todos los miembros de su antigua unidad: S.T.A.R.S. El nombre de dicho cazador da el subtítulo del videojuego, y con razón, porque se ha convertido en un símbolo dentro de la saga -hasta el punto de aparecer íntegro en la segunda película basada en la saga: Resident Evil: Apocalypse- y que prácticamente define a esta secuela; la dota de un carisma especial que a buen seguro, hizo las delicias de los fans, aportando esa novedad al sistema de juego -el concepto de estar en continua persecución, siendo siempre perseguido por un mismo ente que aparentemente nunca muere, y es capaz de cambiar de habitaciones con el personaje manejado por el judaor, no se había visto en anteriores capítulos-.
La verdad es que me esperaba algo más para este título del que tan bien he oído hablar todo este tiempo, y lo cierto es que lo he jugado más por conocer bien la historia de la saga que por el mero placer de disfrutar de un survival horror decente, y es que para eso, lo siento mucho por CAPCOM, pero ya está la saga Silent Hill, mucho mejor enfocada a pasar miedo.
Después de haberlo terminado, el sabor que me dejó fue totalmente agridulce: por un lado está mi afición a la saga, cuya historia me resulta tremendamente interesante, pero es que es más de lo mismo, con un pequeño lavado de cara. Todo sigue igual: el control tosco -aunque con más posibilidades: mejora en el apunte de enemigos y posibilidad de dar giros de 180º-, enemigos parecidos, los puzzles sin ningún misterio... nada de miedo... Gráficamente, el título se ve muy bien en una PlayStation, ahora que en el ordenador... Por otro lado, la tensión que se crea cada vez que aparece Nemesis es digna de ser elogiada.
5 horas me han sido suficientes para terminar el juego, y aunque posea diferentes finales en función de las decisiones del jugador durante la partida, no siento necesidad alguna de rejugarlo. Me he visto lo finales en YouTube y tan contento.
Concluyo finalmente que Resident Evil 3 es un buen título, entretenido para jugar una sóla vez, con un persona principal interesante, pero de inferior calidad que los anteriores capítulos, lastrado por un sistema de juego poco evolucionado, la existencia de un sólo PNJ -la perfecta integración de tramas entrelazadas de los múltiples personajes disponibles en anteriores juegos era uno de los puntos fuertes de esta saga, frente a Silent Hill- y por una historia contada a través de unos personajes menos carismáticos que los de la versión anterior, la cual, para mi, la mejor de cuantas he podido jugar. Veremos a ver qué sucede en Resident Evil: Code Veronica, el siguiente al que le pienso echar el guante...
Eres un viciosu!!
ResponderEliminarA mi este tipo de juegos nunca me han llamado la atención. Yo -cuando tenía vida- era más aficionada a las aventuras tipo Super Mario, Donkey Kong, o estrategia tipo The Settlers y Age of Empires...
Bueno, supongo que para gustos, colores. Últimamente estoy dejando de lado el RPG en pos de las aventuras gráficas -ahora estoy inmerso en el Grim Fandango, uno de 1998, del genial Tim Schafer- y los survival horror, como se puede comprobar :D
ResponderEliminarA mi los que no me llaman son los plataformeros esos que dices, lo siento, necesito una trama más elaborada para engancharme.
De estrategia he podido probar un rato la maravilla de Starcraft II, al que me engancharé en cuanto me haga con él, no me cabe duda. No obstante, para paliar el mono, voy en breve a probar el Worldshift y el Sun Age :D Ya contaré...
Lo que engancha de los resident evil es la trama, la historia, si que es cierto que tiene sus momentos de tensión, pero no creo que los juegos estén enfocados al miedo literal, sino mas bien a la tensión, por lo menos eso es lo que yo sentía al jugar a cada uno de los juegos que menos el Code Verónica el 0 y apartir del 4 que ya la no se puede hablar de tensión sino mas bien de acción, me los he terminado todos. Por desgracia solo jugué a un Silent Hill el cual le pondría un 8 si no fuera por la repetitiva serie de acontecimientos que tienes que realizar para ir pasándote la historia.
ResponderEliminarImagino que el Silent Hill que pudiste disfrutar es el reciente Shattered Memories, el cual se aleja bastante de la jugabilidad característica -para bien o para mal- del resto de entregas de la saga. Con respecto a ese título, no se puede olvidar uno de las circunstancias que enmarcan esa entrega, siendo ésta una especie de remake alternativo homenajeando en cierta manera al juego original, pero con un protagonista distinto adaptado a la psicología del jugador, a través de un test que te realiza un supuesto siquiatra al
ResponderEliminarYo he tenido oportunidad de jugar al Silent Hill original cuando salió, fecha en la que me pareció soberbio, pero hoy en día, a pesar de que me lo regaló un buen amigo -original de PSX, todo hay que decirlo- no he conseguido ser capaz de disfrutarlo: el control es farragoso y al saber ya lo que va a pasar he perdido totalmente el interés por él. Sin embargo, Shattered Memories propone su rejugabilidad a partir de la visión de dicha historia a través de los ojos de un protagonista que ha sobrevivido y está totalmente perturbado ante lo sucedido en el pueblo maldito, y que intenta narrar lo acontecido a un psiquiatra. Cambio que me parece realmente original y loable por parte de la compañía, en un mercado que, siento mucho decirlo, no anda muy fino de ideas -sólo los juegos indies (motivo de una buena entrada en el futuro) están avanzando en este aspecto-.
En cuanto al resto de entregas, la 2 es soberbia y para mi, la más equilibrada de las que he tenido oportunidad de jugar -1, 2 y 3-.